Las islas de la Polinesia Francesa obtienen una gran parte de sus ingresos gracias al turismo, ya que visitantes de todas partes del mundo ansían pasar una vacaciones en estas paradisíacas playas y disfrutar de la calidez del clima que se tiene durante todo el año en este archipiélago. El turismo se ha fomentado en las pasadas décadas, llegando personas sobre todo de Japón, los Estados Unidos y Francia, entre muchos otros destinos.
Para dar abasto a este auge de turistas se han construido instalaciones hoteleras de primera calidad en los destinos más solicitados. En la isla de Bora Bora tenemos hoteles que se encuentran en los motus o islotes que se sitúan cerca de la isla principal. Las instalaciones tienen todo lo que puede ofrecer un hotel de primera categoría diseñado para recibir a visitantes de todas partes del mundo y hacer que se sientan como en casa.
Una de las posibilidades de alojamiento en esta afamada isla es el hotel Four Seasons Resort Bora Bora, que es uno de los mejor valorados entre aquellos que se encuentran en la isla. El servicio es de una excelente calidad y las instalaciones únicas en su diseño, aprovechando las vistas y la belleza de la isla para proporcionar un ambiente muy especial.
Es posible alojarse over-water, es decir, en estancias desde las cuales se puede observar el fondo marino, apreciando tiburones y rayas. El agua es cristalina y permite ver el ecosistema subacuático en todo su esplendor.
Las habitaciones de este hotel están cuidadas al más mínimo detalle y el personal de servicio es muy amable. En las zonas comunes suele haber disponible crema solar ya que el sol es realmente fuerte, toda precaución es más aconsejable para poder disfrutar totalmente de nuestra estancia.
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