Bora Bora es uno de los destinos turísticos más conocidos dentro de la Polinesia Francesa, y en general, en Oceanía. En los últimos años se ha ganado un lugar entre los destinos deseados para pasar la luna de miel por la belleza de los paisajes y las vistas, el cálido sol, las paradisíacas playas y la amable gente que vive en este lugar.
Se encuentra a unos doscientos kilómetros al noroeste de Tahití, y es un lugar conocido desde el año 1722, año en el cual se aventuraran los primeros exploradores hasta estas latitudes. Muchas personas consideran esta isla como una de las más hermosas del conjunto franco-polinesio e incluso como una de las más hermosas del mundo entero.
La isla de Bora Bora es un pequeño atolón que se encuentra dentro del grupo conocido como las Islas de la Sociedad, el cual abarca todas las islas situadas al noroeste de Tahití, y a menos de trescientos kilómetro de Papeete.
La formación de esta isla es especial, ya que su origen es volcánico y las condiciones del mar se deben al coral; un volcán inactivo ha sido rodeado por una laguna que se encuentra cerrada casi totalmente al mar gracias a la forma del arrecife circundante.
Esta isla tiene una población de casi nueve mil habitantes, repartidos entre una isla principal y varios motus, es decir, pequeños islotes alargados que albergan vegetación.
Entre éstos el Motu Tapu es uno de los más fotogénicos y más visitados de la Polinesia; recientemente un huracán causó algunos estragos en la zona de arena del mismo, pero hay muchas fotos anteriores a tal fecha. Las islas Tahaa, Raiatea y Maupiti se divisan a simple vista desde Bora Bora y pueden visitarse con facilidad a bordo de barcas.
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